PROPIEDADES MEDICINALES
Diente de león, Taraxacum, meacamas
Txikoribelar, sorginbelar
Taraxacum officinale
El diente de león es una planta común, con muchas propiedades medicinales, muy utilizadas desde la antigüedad y que ofrece muchas posibilidades. Se trata de una planta amarga lo que la convierte en una gran aliada del sistema hepatobiliar, es un gran depurativo y buena para el aparato urinario.
Descripción del diente de león
De forma habitual se le conoce como “Diente de león” (Taraxacum officinale), pero también se le conoce como achicoria amarga, taraxacum, amargón, meacamas, etc. Su nombre se debe a la forma de sus hojas, que recuerdan a los dientes de un león. Sin embargo, la forma y tamaño de las hojas es muy variable y no es muy útil a la hora de identificarla. Es una planta muy común y conocida por muchas personas, pero puede confundirse con otras plantas de aspecto similar.
En el diente de león, las hojas crecen en roseta, es decir, no tiene tallo, y salen todas juntas de la base de la planta. Las flores, crecen al final de un pedúnculo (una especie de tallo) largo, normalmente más largo que las hojas. Una de las características para no confundirla con otras especies, es fijarse en que, de cada pedúnculo, sale una única cabeza floral. Otra característica del diente de león útil para su identificación, es que es una planta que tiene látex. Al cortar una hoja o el pedúnculo veremos que sale un líquido blanco.
El diente de león, planta comestible
El diente de león es una planta comestible, se puede aprovechar todas sus partes y hay muchas recetas que utilizan diferentes partes del diente de león para elaborarse. Como ejemplo están la miel de diente de león, el vino de diente de león, encurtidos de capullos florales de diente de león, «café» de cereales con su raíz, etc.
Es una planta rica en minerales, hierro, vitamina C, A, vitaminas del grupo B, sales potásicas e Inulina. Las vitaminas se aprovechan mejor si se comen las hojas y los pedúnculos (tallos de la flor) crudas en ensalada y los minerales, sin embargo, se asimilan mejor si se hierve un poquito.
La inulina son polímeros de fructosa. Tiene este nombre “Inula” por haberse descubierto en la raíz del Helenio (Inulina helenium l.) La inulina se transforma en fructosa durante la digestión. La inulina estimula el crecimiento de la microbiota intestinal. Ello se debe a que atraviesa el estómago y el duodeno prácticamente sin sufrir cambios y alcanza el intestino delgado casi sin digerir. Por este motivo, a pesar de ser un hidrato de carbono, los diabéticos la toleran bastante bien. La inulina se acumula en las raíces de plantas como material de reserva, en raíces como la achicoria (Cichorium intybus), el diente de león (Taraxacum officinale), la alcachofera (Cynara scolymus), la bardana (Arctium lappa), la equinácea y el helenio (Inula helenium). Estas sustancias son fibras prebióticas, siendo un buen alimento para la microbiota intestinal.
El diente de león y sus propiedades medicinales para el hígado
Una de las acciones principales del diente de león es sobre los trastornos hepáticos y biliares ya que es colerético (activa la producción de la bilis en el hígado) y colagogo (facilita la expulsión de la bilis retenida en la vesícula biliar).
En los casos en que tengamos el hígado cargado por intoxicaciones alimentarias, medicamentos, u otras toxinas (alcohol o drogas), tomar diente de león ayuda a depurarlo. Otra planta muy útil para eso, es la parietaria. El diente de león está presente casi todo el año, incluso podemos encontrar sus hojas en invierno, pero es en primavera cuando más bonita y potente está, momento en el que el cuerpo depura el hígado de manera natural. Aprovechando la sinergia del momento entre la depuración espontánea del hígado y la explosión de diente de león en el campo en primavera, podemos ayudar a nuestro cuerpo a mejorar sus funciones hepáticas y biliares de manera espectacular.
En casos de hepatitis y cirrosis, ayuda a regenerar y curar el tejido hepático acortando los tiempos de curación.
Es capaz de limpiar las arenillas de la vesícula.
PRECAUCIÓN: En caso de tener obstrucción de las vías biliares, litiasis biliar u otras afecciones biliares no se recomienda su uso, por el riesgo de provocar un cólico. Con prescripción facultativa, se puede tomar en dosis adecuadas (chupitos) y durante periodos de 9 días, descansar 15 días, tomar 9, descansar 15.
Como tomar diente de león para afecciones hepatobiliares:
Se recomienda hacer novenas de tratamiento (9 días), tomando la decocción (un vaso de 200-250ml) de diente de león en ayunas por la mañana y comiendo hojas crudas o tallos en ensalada al mediodía. Después de 9 días valorar y descansar durante dos semanas antes de reiniciar el tratamiento si fuera necesario. La mejor época para hacerlo es primavera, pero el diente de león está presente casi todo el año, y se podría hacer en otros momentos.
El diente de león un fabuloso depurativo
El diente de león además de tener propiedades medicinales para desintoxicar el hígado, desintoxica y depura todo el organismo. Es una de las plantas que actúa sobre los órganos mayormente encargados de limpiar el cuerpo, que son: riñones, hígado, vesícula, bazo y páncreas. Moviliza los tóxicos y limpia el cuerpo, baja el colesterol y el azúcar en sangre.
Como tomar diente de león para depurar el organismo:
Se deben hacer curas depurativas por periodos de 9 días, después de los cuales hay que permitir al organismo descansar durante al menos dos semanas antes de repetir el proceso. Tras recolectar las hojas frescas (las compradas o secas no tienen el mismo efecto depurativo), un puñado de hojas por vaso de agua, se hierven durante 3 minutos y se deja reposar la decocción por al menos 15 minutos. Se cuela y se toma un vaso de caldo en ayunas por la mañana con una pizca de sal. Para complementar la cura se puede comer hojas frescas y pedúnculos (tallos) en ensalada. Si se cortan pequeñito y se mezclan con lechuga, el amargor queda más disimulado y se hace más comestible al paladar.
PRECAUCIONES: Las mujeres que dan el pecho y las embarazadas, no deberían tomar esta planta con la intención de depurar el cuerpo, ya que movilizará toxinas del cuerpo que pueden pasar al bebe a través de la leche materna o la placenta. Sin embargo, sí pueden incluirla en la dieta como alimento esporádico.
Propiedades medicinales del diente de león en la piel
A consecuencia de esa capacidad depurativa tan buena que tiene, es una de las plantas que ayuda a mejorar en los problemas de piel. Muchos de los problemas de piel, vienen derivados de la incapacidad del cuerpo para eliminar toxinas y desechos. Como el diente de león facilita esta función, y limpia la sangre, los problemas de piel como psoriasis, eccemas o dermatitis mejoran.
Cómo tomar diente de león para problemas de piel:
En estos casos, habría que hacer curas depurativas, respetando los tiempos de descanso que antes hemos mencionado.
El diente de león y sus propiedades medicinales en el aparato urinario
El diente de león tiene propiedades diuréticas importantes. Estimula la diuresis y ayuda a eliminar líquidos del cuerpo, al mismo tiempo que limpia riñones, y vejiga. Es tan poderoso, que la raíz en decocción, es capaz de disolver cálculos del riñón y la vejiga.
PRECAUCIÓN: Para estos tratamientos hay que tener precaución en la dosificación e ir valorando el efecto que provoca en nuestro cuerpo, para no provocar una limpieza tan agresiva que nos induzca un cólico. Por ello, hay que probar poco a poco. Se recomienda tomar a chupitos (50ml) dos veces al día y no durante más de 9 días consecutivos.
Su acción diurética es la que popularmente le ha dado el nombre a la planta de «meacamas», ya que, si se toma antes de ir a dormir, nos hace levantarnos a orinar varias veces durante la noche. Por ello, se suele tomar por la mañana y no más tarde del mediodía, para evitar que no nos perturbe el descanso nocturno.
El diente de león y sus propiedades medicinales para el cabello.
Externamente es una buena planta para hacer lociones para el cabello. Su alto contenido en vitaminas y minerales ayudan a reforzar el cuero cabelludo y aportan nutrientes al pelo para que crezca más fuerte. Una buena combinación puede ser una loción de diente de león, bardana y romero o limón (estimulan circulación del cuero cabelludo).